Las violaciones y asesinatos a niñas y adolescentes han llevado el luto a cinco familias dominicanas en las últimas semanas. El más reciente crimen es de Gilda Sánchez, de 18 años, estudiante de modelaje y del tercero de bachillerato, cuyos restos fueron sepultados la tarde de ayer.
El llanto era incontrolable en el entierro de Gilda. Su cadáver fue encontrado con signos de violación en una cañada cercana a su residencia en Herrera, la madrugada del domingo.
Escenas desgarradoras y pedido de justicia se vivieron el cementerio Cristo Redentor donde familiares y amigos fueron a darle el último adiós.
Héctor Sánchez, padre la víctima contó durante el entierro que su hija salió a un colmado cercano a su casa el domingo pasadas las diez de la noche. Pero nunca volvió.
Según narró a reporteros, Gilda fue vista camino a la casa a su regreso del colmado donde salió en piyama a comprar azúcar.
Pero, de acuerdo a la versión de los familiares, Gilda fue detenida por Víctor Manuel, alias El Cojo, quien supuestamente la llamó al interior de su vivienda, ubicada a dos casas de la de la víctima, con el pretexto de que su esposa, Belfani, quien no estaba en la casa, le quería decir algo.
El llanto era incontrolable en el entierro de Gilda. Su cadáver fue encontrado con signos de violación en una cañada cercana a su residencia en Herrera, la madrugada del domingo.
Escenas desgarradoras y pedido de justicia se vivieron el cementerio Cristo Redentor donde familiares y amigos fueron a darle el último adiós.
Héctor Sánchez, padre la víctima contó durante el entierro que su hija salió a un colmado cercano a su casa el domingo pasadas las diez de la noche. Pero nunca volvió.
Pero, de acuerdo a la versión de los familiares, Gilda fue detenida por Víctor Manuel, alias El Cojo, quien supuestamente la llamó al interior de su vivienda, ubicada a dos casas de la de la víctima, con el pretexto de que su esposa, Belfani, quien no estaba en la casa, le quería decir algo.
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